El Debate de la Nación ¿Qué nacion?

El debate de la nación se ha convertido en el debate sobre Cataluña.
La ley electoral, es el suicidio de la democracia española, hace que las minorías sigan mandando en España.


Un presidente que es capaz de anteponer los votos a la legalidad, y para ello no duda en avisar a todos los españoles que hará las artimañas precisas para poner a España a los pies de Montilla, y que el Tribunal Constitucional lo puede burlar un gobierno porque con los votos de los separatistas hará leyes orgánicas que salten por encima del sentido de España, debe ser cesado fulminantemente.

La historia se repite, una vez más los socialistas están desmembrando España, le dan a los separatistas de poltrona y de financiación de la Caixa el poder suficiente para poner una bandera por encima de la de todos los españoles, y lo peor es que lo consentimos.

No hay forma de que muchos socialistas que se sienten españoles fuercen la salida de este traidor de España.

Nos pone en la cola de Europa, nos da permiso para matar niños mientras defiende a ultranza al lince, quiere que el presidente Obama se reúna con él y sin embargo se reúne con genocidas africanos, pretende que los palestinos terroristas se sienten con los israelitas en una mesa suya y sin embargo no deja de mandar constantemente dinero a los terroristas de Hamas en forma de subvenciones a ONG,s. Castiga a los fumadores pero ayuda a los ricos médicos abortistas. Rebaja el sueldo a los funcionarios pero le da subvenciones millonarias a los de la ceja y no le quita cargos con super-sueldo a Leyre Pajín o a la mujer de Montilla, ni piensa en dejar de pagar las vacaciones eternas de los liberados sindicales.

Es un auténtico monstruo de la democracia, es el enemigo de la ciudadanía y de la clase media, a la que está contantemente exprimiendo, aprovechando la pasividad de ésta.

La constitución debe dar un salto hacia el cambio, pero el primero debe ser el de la reforma de la Ley Electoral, y por supuesto dejar de aplicar la Ley D’Hondt , la que hace que cualquier minoría pueda pisar a los españoles. Ese es el verdadero cambio a hacer.

Y qué decir de la oposición, pues lo que ya sabemos, unos chapuceros que siguen maltratando el voto que recibieron, que siguen sin hacer política con mayúsculas, porque su voto siempre es cautivo de los separatistas, cuando no alcanza la mayoría absoluta o de los movimientos internos del partido, porque al fin y al cabo se concentran demasiadas ideologías diferentes.

Todo nos lleva a que en vez del Debate de la Nación , pareciese un par de mítines en Cataluña.

Sólo puedo decir que me da vergüenza que estos diputados sigan representando a la ciudadanía, sólo sus aplausos en pie como si tratase de festival de Eurovisión, donde cada país aplaude a los suyos, y sin embargo los telespectadores seguimos pagando a estos chapuceros que siguen riéndose de España.